Comienzan las despedidas. Algunos amigos se van de vacaciones antes de que nos vayamos nosotros así que ya no las veremos más. Hay abrazos, deseos de buena suerte y felicidad y promesas de mantener el contacto mientras estemos fuera. Han sido pocas por ahora, pero son esas pequeñas despedidas las que crean y, poco a poco, aumentan la tensión de la despedida final, la de la familia. No quiero imaginar cómo será ese adiós aunque sé que, aparte de los abrazos y cariñosos deseos, habrá muchas, muchas lágrimas.
2 comentarios:
El final... del verano... llegó...
Sí. Llegó la despedida y, tengo que reconocerlo, más dura aún de lo que había imaginado. Sé que todo os irá bien, que es un gran cambio y un gran reto pero sois capaces de esto y de mucho más. Que será una gran experiencia y que los cuatro volveréis más sabios aún. Pero, caray, es que os vamos a echar mucho de menos y ahora mismo duele, y mucho.
Vamos a estar pendientes del correo electrónico, de la webcam, de este blog... Y del 1 de julio de 2008. Podéis estar seguros. No nos olvidéis porque aquí os estaremos esperando.
Jo, vaya comentario más bonito... Y gracias por los deseos de que nos vaya todo bien. Eso y tus llamadas de los últimas días me han dado mucho apoyo. Y yo también los voy a echar de menos y no miento si digo que sido uno de los mejores veranos de mi vida. Un beso grande.
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