domingo, junio 01, 2008


Quisiera poder contar que todo sigue igual que como lo dejé el pasado agosto. Y, sí, aparentemente, todo está en su sitio, las cosas de siempre tienen su color de siempre. Nada, ni siquiera la rutina del día a día en esta casa, parece haber perdido su sitio habitual.


El olor a café recién colado y el loro Manolo, con sus silbidos impacientes, me despiertan por la mañana y la lavadora se descoloca más y más con cada centrifugado. Las gatas merodean por la casa buscando comida mientras nosotros decidimos, en el desayuno, qué cocinar para el almuerzo. Ponemos la mesa, comemos y la siesta es un ritual inevitable. Por la tarde, un paseo por Las Palmas, compras y llamadas. Y de vuelta en casa, los baños y cenas, la tele y a la cama. Quizás algún día hay playa o un baño en el Club o alguna visita al parque con los niños. Como cualquier fin de semana de estos últimos años o igual que el verano pasado.


Pero tú no estás. Y todo lo que vivo estos primeros días me parece fingido, como si no estuviera ocurriendo. Sin embargo, está ocurriendo sin ti. El café sale sin ti y Manolo silba sin ti. Las comidas, los baños, las llamadas... Todo esto sin ti. Nada, nada es igual a como lo dejé.


Supongo que, algún día, aprenderé a vivir con tu ausencia y, entonces, las cosas que siguen en su sitio ya no me parecerán simuladas o ajenas. Mientras tanto, y para no derrumbarme en tu propia casa, intento sobrevivir con el recuerdo de cómo lo dejé todo el pasado agosto.

4 comentarios:

Susana dijo...

No es fingido, solo distinto, y eso es porque muy a nuestro pesar a veces, la vida continúa con o sin nosotros, con o sin ELLA. Pedrito y Diego continúan creciendo, dándote alegrías, y olvidando rápido. Arrímate a ellos. Contággiate de su vida, esa vida que somos afortunados por poder disfrutar, aunque ahora duela hacerlo.
Muchísimos besos.

Margarita Figueras dijo...

los siento mi niña pero es así,ahora es realmente cuando estás sufriendo su perdida ya que antes no vivias aquí y es como cuando tienes familia viviendo fuera y a la que ves de año en año o cada x años. Reconozco que incluso así siempre sabes que están ahí aunque no les ves, no como ahora. No te queda más remedio que sufrirlo, ten en cuenta que por lo menos ahí está tu padre y que podrás atenderlo y hacerle compañía, además de tu sobrina y hermanos y resto de famila. Los niños te transmitirán su alegría aunque haya veces que no desees ni verlos...
déja que pase el momento y piensa siempre que "mañana me sentiré mejor" ella siempre estará ahí como y se que mi padre lo está.
¿Cuándo nos vemos?
xxx
Adita

alicia barajas dijo...

un beso querida maite

alicia barajas dijo...

Cuando veo la foto, siento que necesito ir a la playa de Las Canteras urgentemeeeeeenttttttte! un beso.