sábado, julio 07, 2007


Cubicar. En geometría, medir un volumen. Eso viene a hacer la empresa Gil Stauffer el martes que viene. Vamos a cubicar, me dijeron. Y yo me pregunto cómo se puede medir el volumen de tu casa. El volumen de tu vida, en realidad, todos los objetos que tienes en tu casa que forman parte de tu vida diaria; desde las tazas del desayuno que te tomas todas las mañanas hasta las sábanas con las que te tapas por la noche. Las fotos, DVDs, libros y juguetes de los niños. Ropa, bisutería y zapatos. Recuerdos, buenos y malos ratos... Pues no sé cómo pero lo hacen. Y lo meten todo en un contenedor. Y lo mandan a cualquier sitio del planeta (eso dice su página web). Y te lo vuelven a colocar en sitio. ¿Y si por el camino se me pierde algún objeto? Mucho peor, ¿y si se me pierde algún recuerdo? No hay que preocuparse, dicen, ellos te garantizan calidad e idoneidad, siempre con un trato exclusivo hacia mí y mis objetos. Menos mal, mi taza de cereales estaba empezando a angustiarse...

2 comentarios:

marr dijo...

Dicen que el corazón tiene una cajita para los recuerdos. ¿Dónde se cubica a una abuela triste?

Maite dijo...

Si pudiera me llevaba a los abuelos en las maletas...